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La escritura creativa en la era digital

La integración de herramientas digitales en la escritura creativa permite al estudiantado crear historias interactivas que van más allá del texto, expandiendo sus posibilidades para expresar sus ideas y emociones.



Una constante en las clases de escritura creativa que imparten en la universidad es la inclinación de las y los estudiantes por imaginar y construir mundos narrativos propios, que no siempre pueden representar del todo con palabras, y que exigen formas más dinámicas de exploración. Su creatividad los lleva a crear personajes que necesitan recorrer, salir o entrar en diversos escenarios que evolucionan conforme avanza la trama. Esta tendencia plantea una inquietud pedagógica central: ¿Qué sucede cuando los lenguajes tradicionales de la escritura no bastan para materializar la imaginación del estudiantado? La respuesta dentro de mis clases ha sido el uso de herramientas digitales interactivas como puente entre la intención narrativa y su expresión. En este contexto, la tecnología deja de ser un complemento para convertirse en un recurso creativo imprescindible.
Los educadores tenemos el reto de adaptar los programas de escritura a un entorno donde las narrativas ya no habitan exclusivamente en el papel, sino también en pantallas, códigos, hipervínculos e interfaces. La integración de herramientas digitales en la escritura creativa permite a los estudiantes crear historias interactivas que respondan a sus inquietudes, logrando simular sensaciones que en texto serán difíciles de representar. Como, por ejemplo, la sensación de desorientación, de calma o de avanzar y no llegar a ningún lado, descubrir pistas, generar universos que contienen otros mundos, regresar en la historia para elegir otro camino, recolectar objetos, etc. La incorporación de estas herramientas propicia decisiones narrativas que afectan el ritmo y la percepción del relato. Dependiendo del recurso tecnológico utilizado, la historia transmite diferentes sentimientos como tensión, calma, sorpresa, ternura, entre muchos otros.
Los investigadores Veiga y Andrade (2021) mencionan que la incorporación de recursos digitales favorece una participación más activa en las tareas de escritura, mientras que Williams y Beam (2019) señalan que su integración mejora la colaboración entre pares y la interacción social. Además, Nurmieva y Soboleva (2018) han evidenciado que el uso de tecnología estimula el pensamiento creativo, lo que repercute directamente en la calidad de los textos producidos por los estudiantes. Entonces, la tecnología, bien aplicada, puede transformar positivamente el proceso de enseñanza-aprendizaje en el área de escritura creativa.

La literatura más allá del papel

La incorporación de tecnologías digitales da lugar a nuevas formas de creación que escapan del texto lineal para expandirse a la multimedia y lo interactivo. En clase, abordamos cómo la literatura ha ido más allá del papel. Partimos de los géneros clásicos como novela, cuento y poesía, que son fundamentales del libro impreso. Luego, pasamos a los géneros híbridos que mezclan características del libro impreso con recursos digitales. Por ejemplo, el ebook enriquecido, que incorpora elementos como audio y vídeo; hipermedia, donde el lector puede navegar entre fragmentos y tener una lectura no lineal; y la transmedia donde la historia se puede expandir a plataformas como blogs o redes sociales que aportan al desarrollo de la historia. Finalmente, en clase, exploramos los nuevos formatos que surgen con las nuevas tecnologías como aquellos que integran interactividad, inmersión, uso de algoritmos o Inteligencia Artificial (IA). En mi experiencia con el estudiantado observará que las aplicaciones que involucran el juego y el uso de la IA fomentan significativamente la motivación, el compromiso y la autonomía de sus ideas.
Por la naturaleza de la clase, las estrategias implementadas van encaminadas a desarrollar historias en formato tradicional. Trabajamos con distintos ejercicios de escritura creativa que se enfocan en la ideación, conceptualización, textualización y revisión de una entrega final. Para la ideación pueden hacer una lluvia de ideas o retomar la trama de ejercicios de escritura hechos en clase, esto sin preocuparse del resultado final. En la etapa de conceptualización, los estudiantes experimentan con las herramientas digitales para materializar su idea. Para llegar a este punto, primero se debe cumplir con la parte escrita. Después, pasamos a la textualización, donde las ideas se convierten en un escrito que posteriormente se estructura dependiendo del recurso seleccionado. Si eligen escribir narrativa, crearán una historia con un conflicto y, si optan por la poesía, deberán elaborar un poema que utilice recursos literarios como metáforas o imágenes, por mencionar algunos. Se espera que el recurso digital y la historia se integren de forma coherente dentro del formato elegido, ya que cada uno impone distintas limitaciones y posibilidades.

Herramientas digitales para la escritura creativa.

Observó que mis estudiantes del área de Estudios Creativos que pertenecen a diferentes carreras como Arquitectura, Comunicación, Diseño, Arte digital, Letras, Innovación Educativa, Producción Musical, entre otras, comparten una fuerte pasión por narrar historias. Por ello, para guiarlos en la integración de tecnologías digitales en su escritura, me enfoco en aspectos que responden a sus inquietudes en la creación de historias interactivas. Por ejemplo: “¿Cómo hago para que el lector sienta que avanza junto con mi personaje, pero que pueda regresar en la historia?”, usa Bitsy . “Quiero que sepan cómo se ve la habitación sin insertar la imagen”, usa Halo AR . “Quiero que las palabras tengan movimiento como olas de mar”, usa una IA que te permite generar el código para crear epoetry . A continuación, explico cómo integramos estas aplicaciones en clase.

Bitsy

Bitsy es un motor de juegos basado en la web que permite diseñar creaciones interactivas de formato pequeño (estilo 8 bits) de manera ágil, sin requerir grandes conocimientos técnicos y publicarlas fácilmente en formato HTML. En su primer acercamiento a la herramienta, iniciamos sumergiéndonos en la comunidad de itch.io , donde usuarios de todo el mundo comparten sus bitsys . Allí, descubrimos una diversidad sorprendente: desde narraciones sencillas hasta universos complejos que contienen otros mundos, los cuales se revelan a medida que el avatar avanza.
Tras familiarizarnos con las instrucciones básicas en Bitsy —diseñar el avatar, colocar sprites , escribir diálogos y trazar el mundo— llega el momento de darle vida a su narrativa. Para ello, incorporan mecánicas de juego como la recolección de objetos o el uso de puertas bloqueadas con el fin de añadir capas de complejidad narrativa y potenciar la inmersión en el pequeño mundo que han imaginado.
Imagen 1. “El avatar entra al templo”. Se proporciona una descripción del momento. Bitsy creada en clase.

Los ejercicios en clase que han tenido más éxito han sido aquellos donde adaptan la historia de un héroe o heroína, la creación de personajes del reino animal que “hablan” su propio idioma y el bitsy creado le da sentido a toda la historia, así como también se utiliza para adaptar un escrito tradicional a este formato. Aunque parezca increíble, quienes escriben poesía también crean un bitsy que, conforme avanza el avatar, revela los versos del poema.

Halo AR

Halo AR es una herramienta de realidad aumentada que permite vincular contenido multimedia —imágenes, vídeos, audio o modelos 3D— a objetos planos del mundo real. Es decir, basta con enfocar la cámara del teléfono hacia un soporte físico para activar la realidad aumentada.
Imagen 2. “El personaje recuerda cuando conoció a un pingüino y las aventuras que vivieron juntos”. Se muestran las imágenes al sobreponer la aplicación de realidad aumentada en el texto tradicional.

En el aula, utilizamos Halo AR para escribir pequeñas historias en las que el lector debe descubrir pistas o complementar su interacción mediante la aplicación. Por ejemplo, si un personaje está leyendo un libro, nunca se mencione el título: para conocerlo, el lector debe escanear un objeto o dibujo detonante que despliegue la portada o incluso un video del personaje leyendo. Cada una de estas activaciones conforman un halo , y funcionan como llaves narrativas que conectan el mundo físico con el digital.
Uno de los recursos más utilizados en la actualidad en educación es la realidad aumentada (AR) para crear entornos de aprendizaje inmersivos e interactivos (Lampropoulos 2025). Esta facilita la integración de información virtual en el entorno físico del estudiantado y mejora cómo perciben e interactúan con su entorno.

Epoesía

La poesía también ocupa un lugar especial en la clase y la tecnología nos ofrece nuevas formas de explorarla. A través de la poesía electrónica o Epoetry , experimentamos con la creación poética digital, incorporando herramientas de IA para generar el código en el formato deseado. Incluso quienes poseen una página web personal lo integran como una muestra de su escritura.
En este ejercicio, la precisión en la redacción de avisos se convierte en un aspecto central: comprender que una instrucción vaga produce un resultado ambiguo, mientras que un aviso específico y bien estructurado permite obtener una pieza más cercana a la intención creativa original. Así, no solo se practica la escritura poética, pues primero deben tener el poema escrito a modo tradicional, sino que también se adquirirán competencias en formulación de instrucciones y edición de contenido generado por la herramienta.
Las posibilidades son múltiples: desde poemas interactivos que cambian con cada clic, hasta versos que se despliegan en pantalla como si fueran olas en el mar. De esta manera, la poesía se expande más allá de la página para habitar un territorio híbrido entre lo literario y lo digital que invita al lector a ser parte activa de la experiencia.
Entre las dificultades que han atravesado los estudiantes al llevar a cabo su escritura, desde la desesperación inicial, por ser la primera vez que interactúan con alguna de estas herramientas, hasta el reto de adaptarse al tiempo de entrega. Sin embargo, al final del proceso se dan cuenta, como parte de su retroalimentación oral al momento de las presentaciones, de que han logrado definir el conflicto central al hacer la trama más directa para aprovechar las opciones de las herramientas. En varios casos, logran encontrar su voz porque al no copiar otras estructuras se dedican a explorar sus propias ideas. En las presentaciones suelen sentirse contentos y emocionados al ver las reacciones positivas de sus compañeros. Esto les da confianza en sus creaciones.

Reflexión

Algunos docentes temen integrar la inteligencia artificial en su proceso de enseñanza, pero la llegada de la IA no tiene por qué sustituir ni la creatividad ni el pensamiento original del estudiantado, al contrario, es una oportunidad para potenciarlos. Si los docentes, profesores y facilitadores integran diversas herramientas digitales como parte del proceso de escritura creativa, generarán nuevos retos en el aula. De esta manera, verán que trasladar las ideas bosquejadas a mano antes de llevarlas al formato digital elegido, fortalecerá en sus estudiantes la capacidad para estructurarlas e imaginarlas.
No se trata de usar todos los recursos digitales al mismo tiempo, sino de experimentar con aquel que pueda ayudar a su narrativa. Si logran que la aplicación elegida potencie su historia, se ha cumplido con el propósito de fomentar la creatividad.
Al tomar confianza en desarrollar una historia y materializar su imaginación de acuerdo con las limitaciones de cada aplicación, los estudiantes podrán enfrentarse con mayor seguridad a la temida hoja en blanco. Por ello, consideramos que es necesario incorporar tecnologías que potencien la imaginación, el pensamiento crítico y la alfabetización digital. Qué mejor manera de hacerlo que a través de la escritura creativa.
Autor:Observatorio de Innovaciòn Educativa Fuente:https://observatorio.tec.mx/edu-bits-blog/la-escritura-creativa-en-la-era-digital/