El pasado 15 de junio, como parte del ciclo de conferencias de la Escuela de Humanidades y Educación del Tec de Monterrey, el Dr. Serafín Antúnez Marcos, catedrático del Departamento de Didáctica y Organización Educativa, en la Facultad de Educación de la Universidad de Barcelona, España, charló sobre el papel directivo en los procesos de mejora e innovación educativa.
Autoevaluación directiva
Ante el cuestionamiento de cómo mejorar el liderazgo académico, el Dr. Antúnez Marcos hizo hincapié en que los directores y las directoras necesitan autoevaluarse profesionalmente. Además de saber que esa posición en el organigrama no es sólo un puesto de prejubilación y tampoco es un premio, al contrario, es un privilegio con un compromiso demandante y un rol estratégico de suma importancia.
Antes de asumir el puesto todo directivo educativo se debe cuestionar: ¿Conozco mis competencias y lo que me compete hacer? ¿Conozco mi espacio laboral y lo sé separar de lo que no me concierne? ¿Qué capacidad demostrada tengo en los contextos escolares? ¿Tengo autoridad y liderazgo ganados o asumidos? ¿Cuáles son los objetivos de la escuela? ¿Cuáles son mis objetivos?
El expositor destacó que se necesitan líderes educativos capaces de compartir, influir, movilizar, motivar, planificar y orientar procesos. Además, deben desarrollar habilidades sociales; los directores se deben saber comunicar, deben entender cómo pedir las cosas, provocar acuerdos para lograr objetivos, entre otras características más.
Directores frente a la innovación educativa
El catedrático señala que parece que hay un pensamiento persistente por innovar a toda costa si no se quiere estar caduco. Sin embargo, no siempre hay que hablar de cosas nuevas, sino de mejoras. Si con esa mejora se logra una innovación entonces es un logro valioso.
Añadió que antes de innovar es necesario que las escuelas y universidades funcionen bien; se deben sostener las buenas prácticas docentes, establecer roles claros, establecer modelos educativos autónomos y descentralizados, evaluaciones justas y claras, sin olvidar el aspecto administrativo y de funcionamiento general.
Para el Dr. Antúnez Marcos la innovación debe ser permanente y continúa, siempre y cuando se conserve lo bueno que se hace y no se deseche con las novedades; se deben rescatar las experiencias valiosas y coherentes, darles vida a acuerdos valiosos y construir a partir de ello.
El ponente señaló que si se quiere mejorar algún aspecto de la escuela hay que conocerla bien y tener un constante diagnóstico. Se deben sistematizar y analizar de mejor forma los indicios, síntomas, evidencias y datos que lleven a identificar áreas de trabajo críticas.
Así mismo, enfatizó la necesidad de establecer guías y planes de mejora graduales; pequeños pasos para animar a todos y no generar frustración.